8/10/10

Respirando el invierno limeño


Algunas ideas para sobrellevar estos días

El invierno de Lima, este que dicen no es radicalmente frío como otros lugares, nos sigue jugando malas pasadas. Respiramos agua, nos mojamos con pequeñas garúas que escarchan las pistas como si un piso lleno de purpurina plateada nos invitase a recorrerla en medio del mejor y más digno pasacalle festivo.

Una fiesta en medio del agua, la neblina y el cielo gris.

Una fiesta privada que obliga a muchos a reencontrarse con ciertos rituales invernales que nos acercan al calor de nuestro hogar.

Una taza de té caliente, la visita de amigos, interminables filas de películas para ver, una taza de chocolate caliente, muffins. El invierno también nos hace reencontrarnos con nuestros edredones de plumas, dormir en cucharita, abrazarnos más, dormir hasta tarde muy abrigados.

El frío también nos permite apreciar la ciudad desde otra perspectiva, integrarnos a ella. En este juego de pasacalles de plata, también es rico caminar un poco y tener un bonito reencuentro con el cielo blanco, poner un poco de música y caminar por un par de calles en Miraflores.

8/9/10

Alessandra Tenorio visitó la casita

Alessandra Tenorio, poeta, amiga de toda la vida, visitó la casita de la pradera, sus poemas me han cautivado a lo largo de nuestra historia, de nuestra amistad.
Alessandra participó de la performance "Prairie" que presenté en La Despensa, y en nuestra tarde de picnic en la pradera se animó a escribir este poema. Gracias Ale!!

Un corazón como una pradera

Todos somos niños

hasta que se pruebe lo contrario.

Hasta que en el corazón

empiezan a crecer edificios

como campos minados.

Hasta que los mapas se vuelven

extraños y no hay lugar

que nos acoja.

Todos somos niños

hasta que ser buenos hiere

hasta que ser nosotros

nos lastima.

Entonces crecemos violentamente

como tornados, como árboles

sin hojas

y los hombres no lloran

y las niñas deben ser lindas

y ser valiente sale caro

sale realmente caro


y todos somos niños

hasta que se pruebe lo contrario

8/2/10

Sueño

Alguien muy especial me pidió que escriba uno de mis sueños, nunca había hecho algo como eso. Luego de pensar un par de horas tratando de recordar alguno memorable me acordé de este:

Me encuentro en un lugar que parece mi colegio de infancia, camino por los pasadizos, al parecer estoy en medio de un día de clases.
Salgo del edificio, me voy alejando, y veo a lo lejos el paisaje de la costa verde. Lima se manifiesta a través del mar.
Bajando por una de las escaleras que conectan el colegio con el malecón, me voy acercando a la playa. La luz es cálida, amarilla y muy intensa. De a pocos puedo divisar un pedestal o gran base donde se encuentra una mujer desnuda. Alrededor de ella hay un grupo de gente dibujando y un profesor que va explicando paso a paso como dibujar la figura humana. Miguel, uno de los profesores más queridos que tuviera en la universidad, es quien explica cuidadosamente los pasos a seguir sus alumnos. De pronto se da cuenta que yo estoy ahí, le intento hablar, él me mira con cariño, sonríe dulcemente y comienza a caminar. Yo lo sigo y le pregunto ¿cómo está? Él sigue caminando muy rápido y se aleja de mi en dirección al colegio, trato de alcanzarlo pero su rápido caminar lo aleja de mí y desaparece entre las escaleras de subida al malecón.
Corro y subo las escaleras y llego al colegio, entro a mi clase y le digo a todos que Miguel está bien, que está tranquilo, que está en paz.